Mapa de las profesiones con mejor presente en España:
camareros, peones, y cocineros básicamente. Ni rastro del empleo altamente
cualificado, de modo que parece que no sirve para nada cursar estudios
universitarios... Ya se sabe: la ley de la oferta y
la demanda, y esos son los únicos empleos que apenas nos salen en España, que
no solo son de baja cualificación y de escaso valor añadido, sino que además
son precarios, temporales e inestables. Nada de empleos fijos, ni estables, ni
de calidad. Y aún tenemos que dar las gracias de que se pueda crear ese tipo de
empleo: poca cosa y de poca monta, pero algo es algo.
Si entráis en la noticia,
encontraréis un mapa donde indica las contrataciones mayoritarias en tiempos
recientes.
Enfín, parece que de momento
los empleos “made in Spain” no dan más de sí.
MAPA DE LAS PROFESIONES CON MEJOR PRESENTE EN ESPAÑA
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CAMAREROS, PEONES Y COCINEROS
Mapa de las profesiones con mejor presente en España
Mesas. Manteles. Cubiertos. Copas y cafés. Propinas y migas por recoger. Ese es el entorno en el que se desempeña la ocupación con mejor tendencia en el mercado laboral español en lo que va de año: la de camarero. En el último mes del que ofrece datos el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), septiembre, le siguen en cuarto y quinto puesto los cocineros y los ayudantes de cocina, y entre medias, en segundo y tercero, se ‘cuelan’ entre los fogones los peones de las industrias manufactureras y los de transporte de mercancías y descargadores.
“No sólo hay luz al final del túnel, sino que se atisba la salida del túnel de la crisis económica de España”, anunciaba Cristóbal Montoro al término del pasado mes de octubre. No era el primero en señalar indicios de recuperaciónen la economía española, pero quizá sí el que lo expresaba con más rotundidad. Se le han sumado, esta misma semana, el presidente de Telefónica, César Alierta (la crisis “ha acabado, claramente”, señaló), y el de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán. “No podemos caer en la complacencia”, añadía, sin embargo, este último, y la completa radiografía que el SEPE ofrece de las ocupaciones que, mes tras mes, presentan un mayor crecimiento interanual en contrataciones muestra uno de las sombras que apagan la luz que citaba Montoro. Porque los perfiles de esos empleos son, casi exclusivamente, poco cualificados.
[*El porcentaje se refiere al número de contratos sobre el total de los obtenidos por las ocupaciones (un máximo de 15) con tendencia positiva en la contratación (es decir, cuyo número de contratos en septiembre supera el 0,5% del total estatal y que, además, presentan una variación positiva en la contratación respecto al mismo mes de 2012)].
La gráfica ilustra la situación en septiembre, pero si se echa un vistazo a los meses anteriores no hay mucha variación. En todos ellos, el número 1, desde enero, lo ocupan siempre los camareros asalariados, y en alguna ocasión se suman a la lista referida los peones agrícolas, los albañiles, los administrativos que prestan servicios de atención al público… El mapa por provincias presenta la misma hegemonía:
Mapa de las ocupaciones con tendencia positiva en la contratación por provincias
[Pase el ratón por el mapa para verla ocupación con mejor tendencia en septiembre en cada provincia]
“España está creando puestos de trabajo en sectores de poco valor añadido, temporales y en no pocas ocasiones a tiempo parcial. Estamos perdiendo empleo estable y de calidad. A pesar de los buenos datos respecto a las inversiones extranjeras y las exportaciones, sus efectos no son tan grandes como para recuperar el empleo cualificado. Es una de las sombras que persisten”, explica Marcel Jansen, profesor de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad Autónoma de Madrid e investigador de Fedea.
Se trata de una situación que “puede ser normal en la salida de una crisis tan profunda con una oferta tan abultada de trabajadores con poca cualificación”, pero para que esa salida represente una recuperación real del país, España ha de ser capaz de generar empleo en sectores de mayor valor añadido. Para ello, según Jansen, han de darse tres condiciones: que Europa crezca y contribuya con su demanda a las exportaciones españolas; que las empresas se decidan a invertir (y para ello la salida de la recesión no es una señal bastante fuerte: hace falta que vean llenos sus libros de pedidos) y que estas tengan acceso a la financiación, es decir, que mejore la situación de los bancos.
¿Cuándo? Es aventurado ponerle fecha. El Consejo Empresarial para la Competitividad (CEC) que preside también Alierta cifra en un millón los empleos netos que la economía española creará para 2020 respecto a 2010, y señala que serán "en su mayoría cualificados" (en el informe España: Un país de oportunidades). Randstad, en su estudio Into the Gap eleva a cuatro millones los puestos cualificados creados en esa misma fecha. Mientras, en este 2013, buena parte del talento español sigue afanándose, sin desearlo, entre manteles, cubiertos y ollas.