Milagros Hernández, concejal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Madrid, envió el jueves 19 de septiembre una carta al director del Teatro Español, Natalio Grueso, en la que le mostraba su disconformidad con la cartelera de producciones que la sala de actuaciones ofrece este año y que, a su juicio, “cierran las puertas a nuevas oportunidades”. La misiva, a la que ha tenido acceso El Confidencial, está plagada de errores ortográficos. Los dos más graves se concentran en el encabezamiento. La concejal, portavoz de Cultura, escribe “Ha donde va el Teatro Español” cuando lo correcto habría sido decir “A dónde va el Teatro Español”.  
Tras confirmar que Natalio Grueso recibió la carta mal escrita, la concejal que la envió, diplomada en Trabajo Social, reconoció a El Confidencial la autoría de la misma y justificó los errores por la "rapidez" con la que la envió. Hernández la mandó el mismo día a AquiMadriz, el periódico digital de su grupo municipal. En esta ocasión, los editores se encargaron de dejar impoluto el artículo firmado por la concejala.
En el cuerpo de la carta original, que ocupa tres páginas a Word, la concejal escribe en más de diez ocasiones palabras en mayúsculas que deberían ir escritas en minúsculas; confunde en dos ocasiones el pronombre interrogativo indirecto “por qué” con la conjunción causal “porque”(“Pero porque ahora y no el 429 o el 431”); (“porque no el año pasado que era el 450 aniversario de Lope”). En el escrito también varias palabras aparecen sin la adecuada puntuación. Hernández escribe “publico” cuando quería decir “público” en dos ocasiones; “estreno” en lugar de “estrenó” y  evita poner la tilde a palabras como “ahorrándose” “producción” y “fórmulas”. Este último error se repite dos veces en una misma oración. “Y se miran poco otrasformulas de participación, otras formulas de gestión…”.
Milagros Hernández, de 54 años, es concejal en el Ayuntamiento de Madrid desde el año 2007. Además de ser la secretaria del Grupo Municipal de Izquierda Unida-Los Verdes, actualmente es portavoz en la Comisión del Pleno de las Artes, Deportes y Turismo y tiene un salario anual de 62.013 euros, lo que le corresponde a todos los concejales del consistorio madrileño que tienen una dedicación exclusiva.
La contestación de Natalio Grueso a la carta no tiene desperdicio. El director del Español responde a la concejal así: "Estimada Milagros. Tu carta me ha dejado perplejo y estupefacto. En primer lugar por la forma: es imposible cometer más faltas de ortografía en menos espacio. Que la máxima responsable de cultura de un partido político con aspiraciones de gobierno maltrate así el diccionario dice mucho de esa terrible crisis que sufre nuestro país de la que hablas en tu carta. Ni la primera palabra has escrito correctamente. Ni la segunda. Es desolador, tristísimo, si los responsables culturales escriben así me temo que no hay solución para la cultura. Tu carta es la mejor explicación de esa crisis, porque antes de tener un puesto de responsabilidad deberías volver a la escuela. A mí me avergüenza profundamente que un responsable cultural escriba así y, por tanto, cualquier propuesta que hagas pierde toda credibilidad".

Tras hacer un relato de su gestión en el Teatro Español, Grueso termina su relato afirmando que "supongo que los motivos por los que escribes esa carta son otros inconfesables. No se me ocurre otra explicación a tanto disparate".

Firme defensora del coche oficial
La número dos de la lista de IU en las elecciones municipales de 2011 es, además, una firme defensora del coche oficial y de las tarjetas vips gratuitasque el Ayuntamiento de Madrid reparte para que políticos y afines entren sin pagar al Club de Campo, un recinto municipal selecto inaccesible para aquellos que no son socios y cuya lista de espera alcanza miles de personas.
En el pleno municipal del 30 de julio (página 61), Hernández contestó a una pregunta del concejal de UPyD Jaime Berenguer con “quiero tarjeta porque yo quiero entrar en el Club de Campo, yo quiero ver qué pasa en el Club de Campo, y si tengo que entrar con una tarjeta porque no se me permite entrar de otra manera, pues entraré con una tarjeta y lo haré, igual que utilizaré el coche para que mi trabajo sea cada vez más eficaz y pueda utilizar el tiempo con la mejor posibilidad necesaria y posible y no dejar sólo que los concejales del Partido Popular sean quienes lo hagan”, según recoge el Diario de Sesiones del Ayuntamiento de Madrid de aquel día.
Hernández es también una firme defensora del coche oficial para cargos públicos. Al menos así lo manifestó en una entrevista que realizó esta misma legislatura en Tele K, la televisión local de Vallecas, en la que reconoció sin ningún pudor ante el periodista Francisco Pérez y el vocal vecino Dani Garrido que ella necesita el vehículo oficial -pagado por todos los madrileños- para “poder moverme con libertad en esta ciudad”. La concejal de IU aseguró ante las cámaras que para ella no es ningún privilegio disponer de un vehículo oficial porque es un “instrumento de trabajo”. Antes de finalizar, hizo una comparativa con “banqueros” y “determinados empresarios de este país que no sólo tienen coche, también yate (…)”. “A los grandes capitalistas no les tocamos ni un ápice, que son los que realmente deben a los bancos. Yo necesito vivir libremente para poder seguir adelante el trabajo que estoy haciendo”, remató.